José Cajas & Vinicio Tirado

Proyecto:
La Personalidad Y Su Incidencia En Las Relaciones Interpersonales En La Edad Adulta Temprana

Objetivo general:
Investigar la personalidad y su incidencia en las relaciones interpersonales

Objetivos específicos:
Pruebas objetivas:

Describir los reactivos para medir las variables en tema propuesto.

Evolutiva II:
Analizar la influencia de la personalidad en las relaciones interpersonales en la edad adulta temprana.

Neuropsicopatología:
Identificar las regiones cerebrales que intervienen en la personalidad.

Planeación de proyecto creativo:
Diseñar un producto que vaya acorde con el tema propuesto.

Teoría general de los sistemas:

Conceptualizar el impacto de la personalidad en las distintas dimensiones del área laboral.

Producto:
                                                     PAGINA WEB << VIJONALITY>>

Descripción:
La idea es crear una página web pues como se sabe hoy en día Internet es una herramienta utilizada en todo el mundo y nos permite acceder a múltiples recursos y conocer sobre otras empresas con facilidad.Su finalidad es brindar información sobre la personalidad y pueden utilizarse muchas más patologías pues al ser una página web se pueden simplemente añadir la información que creamos pertinente.

Constelaciones de ideas:
Neuropsicología

Psicopatología:

Estudios Previos:

La personalidad es un conjunto de características sentimientos pensamientos relacionados al comportamiento que tiene cada individuo hay que aclarar que cada persona tiene distinta personalidad, propia que le diferencia de los demás, la personalidad es patrón único de pensamientos, sentimientos y conductas de un individuo que persiste a través del tiempo y de las situaciones al pasar el tiempo los factores ambientales, el contexto social definirá la personalidad que tiene el individuo, tiene una gran relación con la construcción de la identidad el cual moldea todas las características que denominamos rasgos o conjunto de rasgos, los 5  rasgos más importantes de la personalidad también llamados factores principales incluye cualidades concretas como las emociones, la sociabilidad y el optimismo, el primer rasgo de personalidad es la apertura a la experiencia es cuando una persona quiere buscar nuevas experiencias personales, este individuo siempre está abierto a nuevas experiencias con una imaginación muy fluida, es consecuente con sus emociones y de las personas que lo rodean posee un amplio conocimiento intelectual, el segundo rasgo de personalidad es la responsabilidad se puede decir que la persona con alta responsabilidad es un individuo organizado, con capacidad de concentración,  termina las tareas objetivos y  piensa dos veces antes de tomar una decisión, el tercer rasgo de personalidad es la extraversión define el grado en que el sujeto se muestra abierto con los demás y canaliza la energía en contextos sociales y culturales dicho de otro modo, el rasgo de extraversión examina cuánto le agrada a un sujeto estar rodeado de otras personas, cuánto le gusta expresarse ante los demás,. su opuesto es la introversión, que se caracteriza en personas reservadas, calladas  no tienen mucho contacto social que a menudo son tachados de antipáticos suelen ser ciertamente independientes, prefieren la rutina, estar solos y no les agrada formar parte de bullicios de gente, lo cual no quiere decir que sean menos felices frecuentemente se muestran tan animados como el que más en círculos estrechos de amistad estas personas son más reflexivos que los extrovertidos, y tienden menos a la acción el cuarto rasgo es amabilidad en que la persona se muestra respetuosa, tolerante y tranquila el individuo amable es aquella que confía en la honestidad de los otros individuos, tiene vocación para ayudar y asistir a quien lo necesite, se muestra humilde y sencillo, y es empático hacia las emociones y sentimientos ajenos el quinto rasgo de la personalidad es estabilidad emocional es cuando una persona afronta sin problema las situaciones complicadas de la vida los sujetos tranquilos, no muy proclives a sentir rabia o a enfadarse, con cosas que no tiene importancia suelen permanecer animados y gestionan muy bien sus crisis personales.
El ser humano es un primate y como tal un animal social. Su conducta se enmarca en el contexto social en el que la influencia de factores culturales e históricos son muy determinantes. La personalidad de cada individuo, por tanto, debe encajar en el modelo establecido en el momento para sobrevivir como grupo. Existe una base genética en la personalidad y en el control de la conducta de los individuos y como siempre la enfermedad, y la forma de entenderla, enseña sobre lo que son o lo que pretenden ser, como animales sociales, ciertos modelos fueron considerados como patológicos y en ocasiones pudieron conferir algunos rasgos que beneficia al individuo.
 En este ensayo se analizará la correlación clínico-genética de la demencia, el modelo de patología emergente en el periodo infanto-juvenil, es una enfermedad moderna o simplemente un enfoque actual respecto a unos rasgos característicos ciertos individuos que, en otro contexto, porque no, bien pudieran haber sido beneficiosos para el portador y su colectivo, la personalidad no es una entidad estática, sino que está sometida a transformaciones, los expertos coinciden en esto, pero discrepan acerca de la cuantía y de los elementos en que se opera el cambio, a veces se describen cambios dramáticos de la conducta, atribuidas a sucesos importantes, pero por lo general, los cambios son graduales y requieren un período más o menos largo de incubación. Los cambios de la personalidad se realizan dentro de ciertos límites, como los determinados por los factores biológicos, el aprendizaje y otras circunstancias socioculturales. Por ello a pesar, de los cambios, la persona se experimenta a sí misma como idéntica a lo largo del tiempo. El cambio de la personalidad es un hecho derivado de las variaciones fisiológicas y de la experiencia, otras connotaciones del concepto personalidad, tienen que ver con la representación que el individuo tiene de sí mismo y con la manera en que se presenta al mundo. Desde esta perspectiva la personalidad es la máscara que enseñamos fuera; una estrategia para ocultar algún aspecto interno y conseguir mejor aceptación social o, simplemente, para preservar una idea más valorizarte de nosotros mismos. De hecho, el origen epistemológico del concepto persona se remonta a la antigua Grecia, donde significaba justo máscara. Allí, en el teatro, se colocaban las máscaras, para representar las diferentes personalidades impostadas por el actor. En la actualidad, la psicología describe las personalidades “como si” para referirse a aquellos individuos que escenifican sus emociones sin sentirlas en realidad.
Un concepto que se tiende a confundir con personalidad es el de identidad. Este último, se refiere a la representación que tenemos de nosotros en relación a las pertenencias de las que formamos parte, y que está muy relacionado con los sentimientos de certeza existencial. Esta diferencia entre ambos conceptos, también se perfilaba ya desde la antigua Grecia, en todas las reflexiones filosóficas sobre el Ser y el no Ser, la esencia y la apariencia, o lo inmutable y lo cambiante.
Localización neuroanatómica
El cerebro es responsable de la conducta y de la personalidad. Permite relacionarse con el medio, procesando toda la información que recibe y a su vez, haciendo posible que emita acciones y respuestas ahí se encuentra el lóbulo frontal, la amígdala y el giro cinglado, el lóbulo prefrontal es el centro de la personalidad y elaboración del pensamiento a existencia de tres dimensiones o rasgos de personalidad: Neurocitismo (vinculado al funcionamiento del sistema nervioso autónomo)
Una vía nerviosa del sistema nervioso autónomo comprende dos neuronas. Una se encuentra localizada en el tronco del encéfalo o en la médula espinal. Está conectada mediante fibras nerviosas a la otra neurona, que se localiza en un agrupamiento de neuronas (denominado ganglio autónomo). Las fibras nerviosas de estos ganglios conectan con los órganos internos. La mayoría de los ganglios del sistema simpático se encuentran localizados justo por fuera de la médula espinal, a ambos lados de ella. Los ganglios del sistema parasimpático se encuentran localizados cerca o en el interior de los órganos con los que conectan.
 Extraversión (vinculado al sistema de activación reticular ascendente)
sistema reticular activador o Sistema reticular ascendente-descendente, es una parte del encéfalo encargada de los ciclos de vigilia y el sueño que normalmente se deben dar en el humano (y en muchas especies animales). Está conformado por un conjunto de neuronas de gran tamaño y con una carga eléctrica más alta que las demás células, que disparan en forma cíclica (40 a 70 veces por minuto) y situadas a lo largo del centro del Tallo emergiendo en ambos hemisferios cerebrales en los cuales se dispersan hasta alcanzar varias estructuras anatómicas cuales son:
Corteza cerebral (para "despertar" o para "dormirla"), El tálamo (para hacer conexión con las aferencias), Los centros respiratorios (cuya ubicación exacta no se conoce pero que algunos sitúan en el hipotálamo y Tallo), El cerebelo, Núcleos del tallo (como los centros vágales cardiovasculares, Medula espinal (para el sistema piramidal especialmente el tono muscular), psicoticismo (vinculado sucesivamente al metabolismo de la serotonina o al de la testosterona).
Los lóbulos frontales, situados en la parte más anterior, se encargan de las funciones más complejas, como el razonamiento, la planificación, la toma de decisiones, la atención o el pensamiento, conocidas como funciones ejecutivas. Los lóbulos frontales también regulan la conducta y son por decirlo de alguna forma, el director de orquesta del cerebro que coordina y dirige al resto de áreas.
Su parte interna integra varias estructuras también con funciones concretas. Las más importantes son el sistema límbico implicado en la regulación de las emociones. Los ganglios basales que son unas estructuras muy importantes para el sistema motor, posibilitando el movimiento de los miembros. El tálamo, situado en su parte más central y profunda, que es una estación de relevo de prácticamente toda la información que procesa el cerebro. Y el hipotálamo, situado justo debajo del tálamo y se encarga de la regulación del sistema endocrino y hormonal.
Dejando a un lado los paradigmas, existen múltiples datos sobre la corteza cerebral y su activación obtenidos mediante técnicas funcionales. En cuanto al lóbulo frontal, tanto la corteza prefrontal polar y dentro lateral derecha, así como la orbito frontal medial, tienen una activación reducida en comparación con la muestra control.
Encontramos lesiones en el lóbulo frontal de los pacientes con TPL tiene un volumen significativamente reducido, concretamente en un 6.2%, esta anomalía estructural explicaría los síntomas impulsivos y anomalías cognitivos, ya que son funciones específicas de esta región. Sin embargo.
(Jurado, 2015)El hipocampo también presenta anomalías volumétricas. Los estudios han demostrado que los pacientes con TPL presentan un volumen bilateralmente reducido
La media del volumen hipo campal se correlaciona negativamente con la duración del abuso en la infancia, hecho que parece ser muy frecuente en la historia de los pacientes en la actualidad existe un debate sobre si esta reducción se debe a una elevada actividad de los sistemas neurobiológicos relacionados con el estrés, como el eje hipotalámico-hipofisario-adrenal, o si está determinado genéticamente.
En lo que respecta a la hipófisis, su volumen en adolescentes con una primera presentación del trastorno tiene una correlación con el número de actos para suicidas
 Los autores informan existe una correlación positiva entre el volumen de esta estructura y el grado de la actividad del eje hipotalámico-hipofisario adrenal.
Se basan en los datos existentes sobre la psicosis, según los cuales el volumen de la hipófisis parece estar relacionado de forma positiva con la activación de esta área, Sin embargo, Garner y cols. encuentran la hipófisis reducida.
Es importante señalar que esta reducción volumétrica de la hipófisis no es específica del TPL, ya que se ha demostrado que en el trastorno de estrés postraumático y en el trastorno depresivo mayor, especialmente con historia de trauma infantil, también se da esta característica anatómica 
Relacionado con áreas mencionadas anteriormente, Brambila y cols. No encontraron diferencias significativas en el caudado, amígdala, lóbulo temporal, corteza prefrontal dorso lateral y volumen cerebral total en pacientes con el trastorno de personalidad límite. La disminución volumétrica del hipocampo sí fue confirmada en este estudio. Además, observaron un incremento del volumen del páutame, resultado que no había sido informado hasta la fecha.
Factores
Factores orgánicos se refiere básicamente a la estructura biológica del individuo que, a través de su herencia, proceso de maduración, influencia hormonal, sistema nervioso y su constitución biológica van a determinar una personalidad específica.
Factores psicológicos o personales son aquellas disposiciones personales las cuales tienen una carga afectiva que lucha por satisfacer necesidades tales como poder ser alimentado, tendencia sexual, necesidad de amar y ser amado, experimentar una esperanza, vivenciar una frustración; va a formar una personalidad.
factores ambientales puede ser los naturales o físicos, culturales y sociales, por lo tanto, el medio físico influye con su paisaje, el clima, la altura, la presión atmosférica, etc., el medio social lo hace a través de la familia, la comunidad, la región, la nación, etc.
Factores que influyen en el desarrollo de la personalidad herencia biológica, ambiente físico, y la cultura debido a que la herencia biológica de la personalidad no puede existir independientemente del aspecto biológico. Como miembro de la raza humana tiene los atributos y características propias de esa especie, aunque existen atributos que lo distinguen como lo son el aspecto físico y la inteligencia. Al nacer el individuo posee un organismo físico y un sistema nervioso y glandular que le ayudan a alcanzar un desarrollo superior a los otros animales. Puede pensar, trasmitir ideas a través del lenguaje, ver las relaciones entre las cosas.
La personalidad es un conjunto de características sentimientos pensamientos relacionados al comportamiento que tiene cada individuo hay que aclarar que cada persona tiene una diferente personalidad propia que le diferencia de los demás, Morris dice que la personalidad es patrón único de pensamientos, sentimientos y conductas de un individuo que persiste a través del tiempo y de las situaciones al pasar el tiempo los factores ambientales, el contexto social definirá la personalidad que tiene el individuo, la personalidad tiene una gran relación con la construcción de la identidad el cual moldea todas las características la cual se denomina rasgos o conjunto de rasgos en este ensayo se verá  5 de los rasgos más importantes de la personalidad también llamados factores principales incluye cualidades concretas como las emociones, la sociabilidad y el optimismo el primer rasgo de personalidad es de la apertura a la experiencia es cuando una persona quiere buscar nuevas experiencias personales este individuo siempre está abierto a nuevas experiencias con una imaginación muy fluida, es consecuente con sus emociones y de las personas que lo rodean posee un amplio conocimiento intelectual el segundo rasgo de personalidad es la responsabilidad se puede decir que la persona con alta responsabilidad es un individuo organizado, con capacidad de concentración, que termina sus tareas objetivos y que piensa dos veces antes de tomar una decisión el tercer rasgo de personalidad es la extraversión define el grado en que el sujeto se muestra abierto con los demás y canaliza su energía en contextos sociales y culturales dicho de otro modo, el rasgo de extraversión examina cuánto le agrada a un sujeto estar rodeado de otras personas, cuánto le gusta expresarse ante los demás,. su opuesto es la introversión, que se caracteriza en personas reservadas, calladas que no tienen mucho contacto social que a menudo son tachados de antipáticos suelen ser ciertamente independientes, prefieren la rutina y el ambiente familiar ellos prefieren estar solos y no les agrada formar parte de bullicios de gente, lo cual no quiere decir que sean menos felices frecuentemente se muestran tan animados como el que más en círculos estrechos de amistad estas personas son más reflexivos que los extrovertidos, y tienden menos a la acción el cuarto rasgo es amabilidad en que la persona se muestra respetuosa, tolerante y tranquila el individuo amable es aquella que confía en la honestidad de los otros individuos, tiene vocación para ayudar y asistir a quien lo necesite, se muestra humilde y sencillo, y es empático hacia las emociones y sentimientos ajenos el quinto rasgo de la personalidad es estabilidad emocional es cuando una persona afronta sin problema las situaciones complicadas de la vida los sujetos tranquilos, no muy proclives a sentir rabia o a enfadarse, con cosas que no tiene importancia suelen permanecer animados y gestionan muy bien sus crisis personales.
La personalidad no es una entidad estática, sino que está sometida o transformaciones, los expertos coinciden en esto, pero discrepan acerca de la cuantía y de los elementos en que se opera el cambio, a veces se describen transformaciones dramáticas de la conducta, atribuidas a sucesos importantes, pero por lo general, los cambios son graduales y requieren un período más o menos largo de incubación. Las transformaciones de la personalidad se realizan dentro de ciertos límites, como los determinados por los factores biológicos, el aprendizaje y otras circunstancias socioculturales. Por ello a pesar, de los cambios, la persona se experimenta a sí misma como idéntica a lo largo del tiempo. El cambio de la personalidad es un hecho derivado de las transformaciones fisiológicas y de la experiencia. 
Otras connotaciones del concepto personalidad, tienen que ver con la representación que el individuo tiene de sí mismo y con la manera en que se presenta al mundo. Desde esta perspectiva la personalidad es la máscara de la persona; una estrategia para ocultar algún aspecto interno y conseguir mejor aceptación social o, simplemente, para preservar una idea. De hecho, el origen epistemológico del concepto persona se remonta a la antigua Grecia, donde significaba justo máscara. Allí, en el teatro, se colocaban las máscaras, para representar las diferentes personalidades impostadas por el actor. En la actualidad, la psicología describe las personalidades “como si” para referirse a aquellos individuos que escenifican sus emociones sin sentirlas en realidad.
Un concepto que se tiende a confundir con personalidad es el de identidad. Este último, se refiere a la representación que tiene en relación a las pertenencias de las que formamos parte, y que está muy relacionado con los sentimientos de certeza existencial. Esta diferencia entre ambos conceptos, también se perfilaba ya desde la antigua Grecia, en todas las reflexiones filosóficas sobre el Ser y el no Ser, la esencia y la apariencia, o lo inmutable y lo cambiante.
En la última década se ha producido un avance considerable en la comprensión y tratamiento de los trastornos de personalidad. Este progreso ha sido gracias a los múltiples estudios realizados desde distintas disciplinas, como la psiquiatría, la psicología de la personalidad, Es de suma importancia que se tenga encuentra que los sujetos con trastornos de la personalidad generalmente no son conscientes de que su comportamiento o sus patrones de pensamiento son inapropiados, por lo contrario, a menudo creen que sus patrones son normales y correctos personalidad es la resultante total de los patrones reales o potenciales del organismo, determinados por herencia y ambiente, tiene 4 sectores en los que se organizan los patrones de comportamiento: inteligencia (cognitivo),carácter (conativo), temperamento (afectivo) y constitución (somático) las disposiciones de la personalidad están organizadas de acuerdo a una jerarquía de generalidad e importancia de cada individuo. (Espinoza, 2012)
La personalidad tiene dos factores importantes que no se puede olvidar uno de ellos el temperamento por su lado es la manera hereditaria o natural con la  persona que interactúa, en el entorno que lo rodea, el temperamento implica el estado de ánimo, nivel de actividad física, la accesibilidad y la intensidad con la que se vive el segundo factor es el carácter es el sello que  identifica y diferencia a los demás, producto del aprendizaje social, esto hace pensar que las personas son únicas y  que poseen  un conjunto de reacciones y hábitos de comportamiento único que a lo largo de la vida van adquiriendo, el carácter probablemente no se manifieste de una forma total y definitiva, si no que pasa por un proceso evolutivo, por lo que carácter no es lo mismo que temperamento, No obstante, en la actualidad existe gran consenso a la hora de afirmar que la personalidad se desarrolla a partir de la interacción de un conjunto de disposiciones hereditarias y de influencias ambientales es necesario realizar más investigaciones para aclarar los factores psicológicos y biológicos que causan el trastorno de la personalidad.
La valoración de la personalidad debe tener en cuenta los antecedentes étnicos, culturales y sociales del sujeto. Los trastornos de la personalidad no se deben confundir con problemas asociados a la adaptación a una cultura diferente que se da tras la inmigración o con la expresión de hábitos, costumbres o valores religiosos o políticos propios de la cultura de origen del sujeto. En especial si se evalúa a alguien de una cultura diferente.
(CIE-10, s.f.)Algunos tipos de trastornos de la personalidad (especialmente el trastorno antisocial y el de límite de la personalidad) tienden a atenuarse o a remitir con la edad, lo que no parece ser el caso en algunos otros tipos (por ejemplo, el trastorno obsesivo-compulsivo y el esquizotípico de la personalidad).
(Psicomed S.L., s.f.)Los trastornos de personalidad son síndromes clínicos prevalentes una alta presencia en la sociedad la depresión y los trastornos de la ansiedad, son muy propensos en la sociedad, al tener uno de estos trastornos, al describir 10 trastornos importantes que están separados por tres grupos los cuales son A, B, C.
Los 10 trastornos principales aparecen entonces agrupados en tres grupos, establecidos en base a ciertas similitudes clínicas:
Grupo A.- los raros o excéntricos. Agrupa al Paranoide, Esquizoide y Esquizotípico presentan gravedad y persistencia de los síntomas, por un lado, y por otro en la pauta generalizada de déficits sociales y relacionales, ámbito donde las personas con estos trastornos de personalidad presentan sus mayores problemas.
Grupo B.- los dramáticos, emocionales o erráticos. Agrupa al Antisocial, Límite, Histriónico y Narcisista. Se caracterizan por la inestabilidad emocional extrema y las dificultades para controlar los impulsos.
Grupo C.- los ansiosos y temerosos. Agrupa a los trastornos por Evitación, Dependencia y Obsesivo-Compulsivo, que tiene en común presentar un monto de ansiedad o miedo exagerados motivados por el miedo a perder el control de uno mismo, de otros significativos o de las situaciones, etc.
En el grupo A se encuentra el trastorno paranoide es cundo el individuo tiene desconfianza y suspicacia general desde el inicio de la edad adulta, es decir que cuando las demás personas quieren hacer algo por ellos, esto es mal interpretado como malicioso siempre sospechan sin una base suficiente piensan que se van a aprovechar de ellos y que les van hacer daño o les van a mentir o engañar, se preocupan por dudas no justificadas acerca de la lealtad o de la fidelidad de los amigos que tienen, al tener una pareja sospechan injustificadamente de su novio esposo de que le es infiel.
   Trastorno de la personalidad esquizotípico las personas que tienen este trastorno tiene un malestar agudo y una capacidad mínima para tener relaciones personales también pueden llegar a distorsiones cognoscitivas o perceptivas y excentricidades del comportamiento, que comienzan al principio de la edad adulta, son personas con creencias raras o con pensamientos mágicos que influye el comportamiento como la superstición o la telepatía.
En el grupo B está el trastorno de personalidad antisocial tiene mucha dificultad adaptarse con los demás y a normas sociales tiene actos que pueden llevar a una detención son deshonestos mienten repetidamente, utilizan un alias para poder estafar o tener un beneficio personal o solo lo hace por placer estos individuos son irresponsables imprudentes y no pueden mantener un trabajo estable existen pruebas de un trastorno disocial que comienza en la juventud.
Trastorno de personalidad Limite las personas que tienen este trastorno tienen inestabilidad en las relaciones interpersonales se da al principio de la edad adulta tiene una notable impulsividad, afectividad, autoimagen pueden tener el uso de sustancias, y tener, ideación paranoide transitoria relacionada con el estrés o síntomas disociativos graves.
Trastorno de personalidad histriónico las personas que tienen este trastorno tienen un patrón general de una excesiva emotividad y una búsqueda de atención que empieza al principio de la edad adulta, no se sienten cómodos en el lugar o situación en las que no son el centro de atención, el comportamiento suele estar caracterizado por un comportamiento sexualmente seductor o provocador siempre muestran una expresión emocional superficial y rápidamente lo pueden cambiar para llamar la atención siempre buscan el aspecto físico para poder llamar la atención de sí mismo son fáciles de sugestionar es decir fácilmente influenciables por los demás o por las circunstancias .
Trastorno de personalidad narcisista tiene un patrón general de grandiosidad en su imagen o en su comportamiento tiene una necesidad de admiración y una falta de empatía el sentido de auto importancia, exagera sus logros y capacidades siempre espera ser reconocidos, aunque no hayan hecho logros proporcionados frecuentemente envidia a los demás o creen que los demás le envidian a él.
En el tercer grupo se encuentra el trastorno de personalidad por evitación tienen un patrón general de inhibición social, sentimientos de inferioridad y una hipersensibilidad a la evaluación negativa, que comienzan al principio de la edad adulta y se dan en diversos contextos, siempre evita trabajos o actividades que impliquen un contacto interpersonal importante debido al miedo a las críticas, la desaprobación o el rechazo. es reacio a implicarse con la gente si no está seguro de que va a agradar, estas personas son extremadamente reacio a correr riesgos personales o a implicarse en nuevas actividades debido a que pueden ser comprometedoras.
Trastorno de personalidad por dependencia estas personas tienen a ocasionar un comportamiento de sumisión y adhesión y temores de separación, que empieza al inicio de la edad adulta, tienen dificultades para tomar las decisiones cotidianas si no cuenta con un excesivo aconseja miento y reafirmación por parte de los demás siempre se siente incómodo o desamparado cuando está solo debido a sus temores exagerados a ser incapaz de cuidar de sí mismo.
Trastorno de personalidad obsesivo compulsivo tienen un  patrón general de preocupación por el orden, el perfeccionismo y el control mental e interpersonal, a expensas de la flexibilidad, la espontaneidad y la eficiencia, que empieza al principio de la edad adulta,  preocupación por los detalles, las normas, las listas, el orden, la organización o los horarios, hasta el punto de perder de vista el objeto principal de la actividad, dedicación excesiva al trabajo y a la productividad con exclusión de las actividades de ocio y las amistades (no atribuible a necesidades económicas evidentes.
Factores biológicos, - básicamente a la estructura biológica del individuo que, a través de su herencia, proceso de maduración, influencia hormonal, sistema nervioso y su constitución biológica van a determinar una personalidad específica.
Factores psicológicos o personales son aquellas disposiciones personales las cuales tienen una carga afectiva que lucha por satisfacer necesidades tales como poder ser alimentado, tendencia sexual, necesidad de amar y ser amado, experimentar una esperanza.
factores ambientales puede ser los naturales o físicos, culturales y sociales, por lo tanto, el medio físico influye con su paisaje, el clima, la altura, la presión atmosférica, etc., el medio social lo hace a través de la familia, la comunidad, la región, la nación, etc.
Factores que influyen en el desarrollo de la personalidad herencia biológica, ambiente físico, y la cultura debido a que la herencia biológica de la personalidad no puede existir independientemente del aspecto biológico. Como miembro de la raza humana tiene los atributos y características propias de esa especie, aunque existen atributos que lo distinguen como lo son el aspecto físico y la inteligencia. Al nacer el individuo posee un organismo físico y un sistema nervioso y glandular que le ayudan a alcanzar un desarrollo superior a los otros animales. Puede pensar, trasmitir ideas a través del lenguaje, ver las relaciones entre las cosas.
LA ADULTEZ TEMPRANA
Cuando una persona menciona la palabra “adultez” fácilmente se puede traer a lamente la imagen de un adulto, ya que todos tenemos a grandes rasgos una representación mental de lo que implica un adulto. Sin embargo, cuando se trata de definir lo qué es un adulto, es sumamente complejo lograrlo. Es por ello que diversos autores se han propuesto realizar esta tarea desde diferentes aproximaciones teóricas. En este sentido, el objetivo de este ensayo es presentar la definición que un hombre de 20 a 45 años, (estudiante casado o padre de familia) “Un adulto es una persona que además de tener una edad madura posee cierto grado de madurez, pues es responsable, sabe cuándo jugar y cuando ponerse serio, y ante los problemas reacciona de una manera general, como la mayoría, de tal manera que se puede esperar su respuesta. Y no es solo cumplir cierta edad, y a que desafortunadamente, hay jóvenes que deben asumir responsabilidades desde niños. Ver por la familia, trabajar, cuidar de alguien (pareja), te hace madurar y convertirte en adulto”.
Las características que se enfatizan en la definición del entrevistado a parte de la edad cronológica, son la madurez y la asunción de responsabilidades sociales (familia y trabajo). Sobre la madurez, Quintanilla (2003) menciona que es un término que ha adquirido muchos significados, puede referirse a cierto estilo de vida, se le utiliza para referirse a una etapa de la vida en la que la socialización es básica, ya que el sujeto pasa de una existencia sin responsabilidades a formar una familia, con todo lo que ello supone, además de unas exigencias de horario de trabajo debidas a su nueva actividad laboral.
Este es un cambio espectacular de obligaciones y deberes, tanto en la planificación de su futuro, como en la estructura de una nueva vida.
Todo esto implica un giro en su estatus social y, por supuesto, en sus relaciones sociales y comportamientos. Todos los cambios que se producen en la edad adulta indican que los aspectos sociales son la clave de la madurez.
Lo que especialmente marca el cambio de vida del sujeto, no es tanto la edad, sino la época y la sociedad en la que le ha tocado vivir. El sujeto irá actuando en cada momento según las exigencias que determinan los roles y estatus sobre los que va pasando. Además, cada momento socio-histórico tiene sus normas y tareas.
La personalidad puede sintetizarse como el conjunto de características o patrón de sentimientos, emociones y pensamientos ligados al comportamiento, es decir, los pensamientos, sentimientos, actitudes, hábitos y la conducta de cada individuo, que persiste a lo largo del tiempo frente a distintas situaciones distinguiendo a un individuo de cualquier otro haciéndolo diferente a los demás. La personalidad persiste en el comportamiento de las personas congruentes a través del tiempo, aun en distintas situaciones o momentos, otorgando algo único a cada individuo que lo caracteriza como independiente y diferente. Ambos aspectos de la personalidad, distinción y persistencia, tienen una fuerte vinculación con la construcción de la identidad, a la cual modela con características denominadas rasgos o conjuntos de rasgos que, junto con otros aspectos del comportamiento, se integran en una unidad coherente que finalmente describe a la persona. Ese comportamiento tiene una tendencia a repetirse a través del tiempo de una forma determinada, sin que quiera decir que esa persona se comporte de modo igual en todos los casos. Es decir, la personalidad es la forma en que pensamos, sentimos, nos comportamos e interpretamos la realidad, mostrando una tendencia de ese comportamiento a través del tiempo, que nos permite afrontar la vida y mostrarnos el modo en que nos vemos a nosotros mismos y al mundo que nos rodea. Nos permite reaccionar ante ese mundo de acuerdo al modo de percepción, retro-alimentando con esa conducta en nuestra propia personalidad. Cada persona al nacer ya tiene su propia personalidad con ciertas características propias, que con el paso del tiempo más el factor ambiental y las circunstancias es como se definirá esa persona. La personalidad será fundamental para el desarrollo de las demás habilidades del individuo y para la integración con grupos sociales.
Un joven puede encontrar trabajo y deleitarse en la vida en soltería. Una pareja joven puede mudarse con los padres en lo que termina la escuela o se establece o por haber perdido el trabajo. Estas tareas tradicionales del desarrollo, como encontrar trabajo fijo y establecer relaciones románticas de largo plazo, pueden posponerse hasta los treinta o incluso después.
Los factores que influyen en los caminos hacia adultez son:
Género, Capacidades académicas, Primeras actitudes hacia la educación, Expectativas al final de la adolescencia, Clase social
Mucho depende del desarrollo del yo: una combinación de la capacidad de entenderse y entender al mundo, de integrar y sintetizar lo que uno percibe y sabe y de hacerse cargo de planear el curso de la propia vida. Algunos adultos emergentes tienen un yo más desarrollado que otros y, por lo tanto, son más capaces de aprender a valerse por sí mismos (Tanner, 2006)
Es la principal tarea de la adultez emergente, la cual comprende 3 etapas:
Etapa 1 Se encuentra inserto en la familia de origen, pero empiezan a crecer las expectativas de autoconfianza y autarquía.
Etapa 2 Sigue vinculado a su familia (y quizá dependa económicamente de ésta), pero ya no está inserto en ella. Al final de esta etapa, el adulto comienza a establecer compromisos serios y a ganar los recursos necesarios para mantenerlos.
Etapa 3 Independencia de la familia de origen (al mismo tiempo que conservan los lazos), y a la dedicación de una carrera, pareja y posiblemente hijos.
Moratoria Contemporánea
30% de los adultos contemporáneos pasan por lo que se llama Moratoria contemporánea, en la que la mayoría de los jóvenes se entregan a pocas deliberaciones conscientes, y más bien, adoptan un enfoque pasivo (difuso) o siguen el consejo de sus padres (cierre). Para algunos, una moratoria extensa puede llevar a un callejón sin salida de inmadurez, que es una alternativa más o menos permanente en la adultez. Sin embargo, aproximadamente 75% de ellos establecen alguna identidad ocupacional hacia el final de sus veinte.
Desarrollo de las relaciones adultas con los padres
Un criterio para medir que tan bien los adultos emergentes manejan el abandono del hogar paterno es su habilidad para mantener relaciones autónomas pero próximas con sus padres Cuando los jóvenes se van de casa, tienen que completar la negociación sobre la autonomía que comenzó en la adolescencia y volver a definir la relación con sus padres para que ésta sea una relación entre adultos. Los padres que no pueden aceptar este cambio retrasan el desarrollo de sus hijos (Aquilino, 2006)
Los adultos emergentes todavía necesitan de la aceptación, empatía y apoyo de sus padres, y el apego a ellos no deja de ser un elemento fundamental del bienestar. El apoyo económico de los padres, en especial para la educación acrecienta la posibilidad de que los adultos emergentes tengan éxito en sus papeles de adultos
Los hijos adultos que viven aun con sus padres, pueden tener problemas para redefinir su relación con éstos. La transición puede ser gradual y tardar muchos años, en especial si el hijo adulto todavía necesita el apoyo económico de sus padres
Cuatro enfoques del desarrollo de la personalidad
Plantean diferentes cuestiones sobre la personalidad adulta, estudian aspectos diferentes de su desarrollo y, por lo regular, aplican métodos distintos:
Modelos de etapas normativas
Establecen que los adultos siguen una secuencia básica de cambios psicosociales relacionados con la edad. Los cambios son normativos ya que parecen comunes en una población, además aparecen en periodos sucesivos que a veces están marcadas por crisis emocionales que preparan el camino para nuevos avances.
La sexta etapa del desarrollo psicosocial de Erikson, intimidad frente a aislamiento, inicia lo que veía como el principal problema de la adultez temprana. Sin embargo, los adultos necesitan aislarse para reflexionar sobre su vida. Al tiempo que resuelven las exigencias contradictorias de intimidad, competitividad y distancia, desarrollan un sentido ético que Erikson consideraba la nota distintiva del adulto. (FIGUEROA, 2011)
Los adultos tempranos con un sentido sólido del yo están listos para fundir su identidad con la de otra persona.
La resolución de esta etapa da por resultado la virtud del amor, la devoción mutua entre parejas que decidieron compartir su vida, tener hijos y ayudar a éstos a lograr un desarrollo sano.
Las identificaciones de las tareas del desarrollo deben completarse para lograr una sana adaptación a cada etapa de la vida
El desarrollo no termina al llegar a la edad adulta, los seres humanos cambiamos y nos desarrollamos durante toda la vida.
Modelo del momento de los eventos
El curso del desarrollo depende del momento en que ocurren ciertos eventos en la vida de las personas.
Los momentos normativos de la vida (o de la edad), ocurren normalmente en ciertas épocas de la vida, y se concretan en hechos como el matrimonio, la paternidad, el nacimiento de los nietos y el retiro.
Según el modelo, las personas son muy conscientes de su momento y del reloj social, las normas de la sociedad y lo que en ésta se considera el momento oportuno para ciertos acontecimientos de la vida.
Si los eventos se presentan a tiempo, el desarrollo avanza de manera uniforme, si no, sobreviene el estrés como resultado de un suceso inesperado (como el desempleo), un hecho a destiempo (enviudar a los 35 años o retirarse a los 50), o de que no se presente un acontecimiento (nunca casarse o poder tener hijos).
Estos tres tipos difieren en la resiliencia del yo, que es la capacidad de adaptarse bajo estrés, y el control del yo, el control de uno mismo.
Las personas con yo resiliente están bien adaptadas, son confiadas, independientes, articuladas, atentas, serviciales, cooperadores y se reconcentran en sus labores.
Los individuos sobre controlados son tímidos, callados, ansiosos y dependientes; se guardan lo que piensan, evitan conflictos y tienen más a la depresión
Las personas sub controladas son activas, enérgicas, impulsivas, tercas y se distraen con facilidad.
Estos tipos de personalidad u otros semejantes se presentan en los dos sexos, entre culturas y entre grupos étnicos, y en niños, adolescentes y adultos.
Si bien los tipos de personalidad establecidos en los niños, pronostican trayectorias o patrones de conducta de largo plazo, ciertos eventos pueden cambiar el curso de la vida. Por ejemplo, para los jóvenes con problemas de adaptación, casarse con una persona que brinde apoyo puede generar resultados más positivos.
Bases de las relaciones íntimas
Erikson consideraba que el desarrollo de relaciones íntimas es una tarea crucial de la adultez temprana. La necesidad de establecer relaciones firmes, estables, cercanas y comprometidas es una motivación importante de la conducta humana.
Un elemento relevante de la intimidad es la autorrevelación que consiste en “revelar a otra persona información importante sobre uno mismo”. Las personas incrementan y mantienen cercanía debido a las revelaciones mutuas, la sensibilidad a las necesidades de la otra y a la aceptación y es respeto recíproco.
Las relaciones íntimas requieren de autoconciencia, empatía, capacidad para comunicar emociones, resolver conflictos y respetar los compromisos, y, si la relación es potencialmente de naturaleza sexual, de una decisión sexual. Estas capacidades son centrales cuando adultos tempranos deciden si se casan o establecen relaciones íntimas y si tienen o no hijos.
Las expresiones de intimidad de la adultez temprana: amor y amistad
Amistad
En esta época, las amistades son menos estables que en períodos anteriores y posteriores. Se centran en el trabajo y las actividades con padres y en compartir confidencias y consejos. Algunas amistades son extremadamente íntimas y alentadoras, otras están marcadas por conflictos frecuentes. Algunas duran toda la vida, otras son efímeras. Los lazos entre algunos “mejores amigos” son más estables que los que unen con una amante o cónyuge.
Los adultos tempranos solteros dependen más de los amigos para satisfacer sus necesidades sociales que los adultos tempranos casados o los que son padres.
Las personas con amigos tienen sentimiento de bienestar.
Por lo general las mujeres tienen amistades más íntimas que los hombres.
Muchos adultos tempranos asimilan a sus amigos en las redes de su familia de elección. Estos amigos cercanos y confiables se consideran parientes ficticios.
Amor
Los tres elementos o componentes del amor son intimidad, pasión y compromiso.
La intimidad, el elemento emocional, incluye autorrevelación, lo que lleva al vínculo, la calidez y la confianza. La pasión, el elemento motivacional, se basa en impulsos internos que traducen la estimulación fisiológica en deseo sexual. El compromiso, el elemento cognoscitivo, es la decisión de amar y quedarse con el ser amado. El grado en que está presente cada uno de los tres elementos determina qué tipo de amor siente una persona.
La comunicación es parte esencial de la intimidad.
Estilos de vida marital y no marital
Vida de soltero
Algunos adultos tempranos están solteros porque no han encontrado la pareja correcta, pero otros eligen estar solteros.
En la actualidad son más las mujeres que se mantienen y hay menos presiones sociales por casarse.
Algunas personas quieren libertad para recorrer el país o el mundo, progresar en su carrera, proseguir con su educación o hacer trabajo creativo sin tener que preocuparse por como su búsqueda de autorrealización podría afectar a otra persona. Algunos disfrutan de la libertad sexual. Otros consideran estimulante su estilo de vida. Unos más prefieren la soledad. Otros posponen o evitan el matrimonio por miedo de terminar en un divorcio.
Cuando el matrimonio termina
En Estados Unidos, el matrimonio promedio que termina en divorcio dura de siete a ocho años. Lo más frecuente es que tras un divorcio, se contraigan segundas nupcias y se forme una familia que incluya hijos naturales o adoptados de uno o de los dos miembros de la nueva pareja.
Divorcio
Los factores que más influyen en el pronóstico de la duración del matrimonio, es la edad (en cuanto más edad, más estabilidad), la escolaridad (entre mayor escolaridad, más duración) y la religión (personas con religión tienen más estabilidad.
Causas del fracaso de los Matrimonios
Los motivos más mencionados son la incompatibilidad, y la falta de apoyo emocional. En tercer lugar, está el maltrato del cónyuge.
Muchas parejas concluyen que exponer a los hijos a conflictos constantes de sus padres les causa más daño. Para las parejas sin hijos, es cada vez más fácil volver al estado de soltería.
El divorcio engendra más divorcios. Los adultos con padres divorciados tienen más posibilidades de esperar que su matrimonio no dure y de divorciarse también, que los hijos de padres que se mantuvieron juntos.
El ajuste del divorcio
Terminar un matrimonio, aunque éste haya sido infeliz, es doloroso para los dos, sobre todo si quedan hijos pequeños en el hogar. Las personas que estuvieron felizmente casadas, o piensan que estuvieron, reaccionan de manera más negativa y se adaptan más lentamente al divorcio. Las parejas que vivieron un matrimonio conflictivo, su término mejora el bienestar.
Un factor importante del ajuste es el desapego emocional del cónyuge anterior. Las personas que discuten con su ex pareja y las que no han encontrado otra pareja, experimentan más estrés. Es de ayuda una vida social activa, tanto en el momento del divorcio como después.
Nuevas nupcias e hijastros
Representan el triunfo de la esperanza sobre la experiencia. Las pruebas de la verdad de este aforismo, es que tienen la misma probabilidad de terminar en un divorcio que las del primer matrimonio.
Cuanto más reciente sea el matrimonio actual y cuantos mayores sean los hijastros, más difícil parece ser el papel de madrastra o padrastro. En particular, las mujeres tienen más dificultades para criar hijastros que a sus hijos biológicos, quizá porque pasan más tiempo con los niños que los hombres.
Como quiera que sea, la familia mixta tiene potencial para crear una atmósfera cálida y nutricia, como cualquier familia que se interesa por sus miembros. Se han identificado varias fases de ajuste: al principio los adultos esperan un ajuste rápido y uniforme, mientras que los hijos sueñan con que el padrastro o madrastra se irá y volverá su verdadero progenitor. Cuando surgen conflictos, se pone del lado de sus hijos biológicos. Con el tiempo, los adultos forman una alianza sólida para satisfacer las necesidades de todos los hijos. El padrastro o la madrastra asume una función de figura adulta y la familia se convierte en una unidad integrada con su propia identidad.
Los vínculos que se forjan en la adultez temprana con amigos, amantes, cónyuges e hijos llegan a durar toda la vida e influyen en el desarrollo de la adultez media y la adultez tardía. Los cambios que experimentan las personas en sus años más maduros también afectan sus relaciones.
 Si partimos de que en la prevención de riesgos laborales intervienen de modo decisivo factores humanos personales, es necesario ahondar en la personalidad individual y su relación con el comportamiento que las personas manifiestan dentro de su entorno laboral y, todo ello, desde un punto de vista científico que eluda –en lo posible- lo subjetívale en dicho estudio.
En esta serie de artículos nos proponemos descifrar algunas de las principales claves para comprender mejor la compleja relación entre personalidad y comportamiento laboral, más concretamente, en el que nos ocupa ofrecemos una primera aproximación a la cuestión y los fundamentos de la investigación al respecto, uno de cuyos orígenes más destacables podemos encontrarlo en la aportación de Hans Eysenck a finales de los años setenta. La historia de la investigación sobre la personalidad (y también la capacidad cognitiva) como elementos de predicción del comportamiento de los individuos en el entorno de trabajo ha sido algo así como la búsqueda del Santo Grial: prolongada, marcada por el fanatismo entusiasta y aparentemente interminable. Si bien han habido épocas como los años veinte, los cincuenta o los ochenta muy intensas al respecto, en las últimas décadas el interés de empresas y gestores no se ha mantenido ajeno a la imparable deriva sistémico-social que parece afectarlo todo en la sociedad moderna, demasiado proclive a endiosar la rapidez, el pragmatismo, la estética banal y la comodidad por encima de todo, incluso por encima de la esencia de las cosas y por supuesto del rigor científico. Así, en las últimas décadas se pusieron de moda modelos muy simplistas (siempre desde nuestro punto de vista y con el máximo respeto hacia sus partidarios) tales como el famoso modelo de competencias, u otra infinitud relativos a estrategias de liderazgo o de dirección de personas que quizá en su origen tuvieron una base ideológica sustentada en la investigación experimental, pero que han ido mayoritariamente evolucionando hacia un maremágnum de prácticas científicamente inconsistentes y escasamente eficaces para el objetivo de una adecuada comprensión de la diversidad individual como base desde la que aplicar estrategias de dirección individualizadas.
En la actualidad, la comunidad científica está recobrando el interés por determinar las características de personalidad, evaluables con garantías psicométricas, que se asocian significativamente a diferentes aspectos del rendimiento en contextos de trabajo y permiten predecirlos de manera también significativa (Barrick, Stewart y Piotrowski, 2002; Furnham, 2009; Hogan y Holland, 2003; Holland, 2004; Hurtz y Donovan, 2000; Robbins, 2005; Witt et al., 2002). Por ejemplo, algunos meta-análisis (donde se comparan y clasifican los resultados de cientos de los principales estudios realizados) sugieren que existen bases sólidas para considerar el uso de evaluaciones de personalidad en la selección de empleados (Barrick y Mount, 1991; Tett et al., 1999). En esta línea, investigaciones empíricas muy recientes han mostrado que los factores considerados en estos modelos son útiles para predecir determinados criterios vinculados con el comportamiento de los individuos en el trabajo (Furnham, 2008). Siendo conservadores, toda la evidencia parece indicar que solamente la personalidad (evaluada con pruebas con garantías psicométricas) es la responsable de entre el 15 y el 30% de la variación del comportamiento de los sujetos en el contexto ocupacional. La personalidad incide en el comportamiento laboral a través de 3 vías:
En primer lugar, existe una relación directa entre la personalidad y determinados fenómenos, mecanismos, procesos psicológicos y tendencias de comportamiento que se manifiestan en el entorno laboral. Algunos de los fenómenos o procesos psicológicos asociados a las características de personalidad son sutiles y complejos, mientras que otros pueden llegar a resultar demasiado simples. Por ejemplo, las personas extravertidas prefieren y trabajan mejor con música de fondo que las personas introvertidas, o las personas introvertidas presentan mayor facilidad para mantener la atención sostenida en una tarea que los sujetos extravertidos, etc…
En segundo lugar, todas las organizaciones tienen una estructura formal (e informal) y determinadas normas de trabajo, procedimientos específicos y valores corporativos que pueden prevalecer durante mucho tiempo. Estas variables formales (e informales), que podríamos denominar, “organizativas” pueden tener un efecto muy significativo en relación al comportamiento del individuo en su trabajo, modificando los efectos naturales de su personalidad. De aquí surge el concepto de “adecuación entre la persona y el puesto de trabajo” que tanto ha influido en la psicología ocupacional y vocacional. Así pues, las variables organizacionales y el entorno del puesto de trabajo moldean y recompensan selectivamente el funcionamiento de la personalidad.
La última década ha sido una explosión del interés y la investigación sobre cómo, cuanto y por qué los rasgos de personalidad predicen el comportamiento en el trabajo (De Fruyt y Salgado, 2003). Además, muchos estudios cross-culturales han mostrado que las relaciones entre diversos aspectos de la cultura organizacional y la personalidad parecen ser estables (Nikolau y Robertson, 2001). Estos estudios han examinado ambas caras de la conducta en el trabajo, tanto los aspectos positivos (p.e. satisfacción con el trabajo y productividad) como los aspectos negativos (p.e. absentismo laboral). Así, por ejemplo, Judge et al. (1997) mostraron que los trabajadores extravertidos típicos, muy sociables y buscadores de excitación y emociones presentas tasas de absentismo hasta cuatro veces superiores a las de los trabajadores con auto-disciplina y responsables. Además, en este sentido Ones, Viswesvaran y Schmidt (2003), revisaron la eficacia de los test de personalidad para predecir absentismo, concluyendo que es probablemente mucho mejor utilizar estos test en los procesos de selección para predecir unos altos ratios de absentismo laboral que intentar hacer esto mismo con los sujetos una vez han sido seleccionados. Recientemente, Hogan y Holland (2003) mostraron que el rendimiento en el trabajo puede ser predicho significativamente por las principales dimensiones de personalidad Big Five (que serán expuestas en próximos artículos), encontrando unos coeficientes de validez de .43 para Estabilidad Emocional (bajo Neuroticismo), .35 para Extraversión, .34 para Cordialidad, .36 para Responsabilidad y .34 para Apertura Mental. Este tipo de estudios están comenzando a ser cada vez más sofisticados y a centrarse en las relaciones dinámicas entre los rasgos de personalidad y las variables de trabajo (Ilies y Judge, 2002). Así, Witt el al. (2002) mostraron que algunos de los rasgos Big Five interaccionaban entre sí: sujetos con una alta Responsabilidad y una alta Cordialidad recibían mejores ratios de desempeño en el trabajo que aquellos sujetos que tenían una alta Responsabilidad, pero una baja Cordialidad con independencia de los puestos analizados. Además, se está siendo cada vez más sofisticado tanto en la elección de las medidas de personalidad como en la elección de aquellos criterios de desempeño en el trabajo que sean más válidos y fiables (Smith, Hanges y Dickson, 2006).
TEORIAS DE PERSONALIDAD APLICADAS AL ÁMBITO LABORAL
Algunas teorías tratan de abarcar la personalidad mediante la evaluación de muchos rasgos mayores, mientras que otras evalúan determinados rasgos específicos. La mayoría de los investigadores han optado por las primeras pues tratan de describir y evaluar a las personas en el trabajo de una manera profunda y luego analizar la manera en que los rasgos se relacionan con determinados comportamientos ocupacionales. En los próximos artículos, vamos a revisar brevemente dos de las principales teorías y sus implicaciones en el comportamiento laboral. En el presente artículo la teoría de Hans J. Eysenck y en sucesivos la teoría Big Five, que cuenta actualmente con el mayor consenso de la comunidad científica.
1. TEORÍA DE LA PERSONALIDAD DE EYSENCK (MODELO PEN)
Sin lugar a dudas, la más refinada teoría de los rasgos de la personalidad es la de Hans Eysenck, de la cual se ha dicho que es como hallar la estación londinense de St. Pancras (una muy elaborada estructura Victoriana) en la selva de las teorías de personalidad (Furnham, 2008). Esta teoría, que ha sufrido algunas modificaciones a lo largo de más de 35 años, demuestra el fundamento psicofisiológico de la personalidad, es decir es una teoría integral de la personalidad, que va mucho más allá del simple nivel psicométrico sino que tienen sus raíces en las bases y fundamentos biológicos del comportamiento humano. Aunque la teoría de Eysenck se ha aplicado a una amplia gama de actividades, incluida la delincuencia, el sexo, el tabaquismo, la salud y los procesos de aprendizaje, se ha trabajado menos con los aspectos relacionados con el comportamiento ocupacional. Sin embargo, en los últimos 25 años se tienen evidencias no sólo de la aplicación de la teoría de Eysenck, sino de su valor de predicción en la esfera laboral, Eysenk define tres rasgos de personalidad: Extraversión, Neuroticismo (inestabilidad emocional, o emocionalidad), y Psicoticismo (Dureza). Cada una de estas dimensiones son continua a lo largo de los que puede situarse a las personas. Los estudios factoriales han demostrado una consistencia considerable de estas tres dimensiones. Dichas dimensiones se consideran independientes entre sí (ortogonales).
Estos factores pueden ser medidos a través de cuestionarios e incluso mediante pruebas objetivas. La naturaleza de los mismos es, fundamentalmente, de carácter constitucional; esto es, las diferencias que encontramos entre las personas son debidas fundamentalmente a la influencia genética y, especialmente, a la base biológica que los sustenta, sin dejar de lado, lógicamente, la influencia tanto familiar como social. Estos tres rasgos han de ser entendidos como la cúspide de la jerarquía de la personalidad. Por debajo de ellos se sitúan un conjunto de factores más específicos, la confirmación de la existencia de una base biológica para estas dimensiones ha tenido gran importancia no sólo para la psicología de la personalidad normal, sino también para la psicopatología y para la predicción de comportamientos en los que estas dimensiones son relevantes. El siguiente cuadro describe prototipos del Modelo PEN.
Descripción de prototipos del sistema PEN Extraversión/Introversión (E/I)
El extrovertido típico es sociable, le gustan las fiestas, tiene muchos amigos, necesita tener a alguien con quien hablar y no le gusta leer o estudiar en solitario; anhela la excitación, se arriesga, frecuentemente se mete en todo, actúa por razones del momento y generalmente es un individuo impulsivo; le gustan las bromas, siempre tiene una respuesta a punto, y generalmente le encanta el cambio; es despreocupado, de fácil cambio, optimista, y su lema es “diviértete y sé feliz”. Prefiere estar moviéndose y haciendo cosas, tiende a ser agresivo y se enfada rápidamente; a la vez que sus sentimientos no se mantienen bajo un fuerte control, no es siempre una persona en quien poner confianza.
El introvertido típico es un individuo tranquilo, retraído, introspectivo, más amigo de libros que de personas; es reservado y se muestra distante, excepto con los amigos íntimos; suele ser previsor, “mira antes de saltar”, y desconfía de los impulsos del momento; no le gusta la diversión bulliciosa, considera seriamente los asuntos cotidianos y disfruta de un modo de vida ordenado; controla cuidadosamente sus sentimientos, raras veces se comporta de una manera agresiva, y no se enfada con facilidad; se puede confiar en él, es algo pesimista y tiene en gran autoestima las normas éticas.
Neuroticismo o Inestabilidad/Estabilidad emocional (N) Las personas con una puntuación alta en neuroticismo (neuróticas) tienden a la hipersensibilidad emocional y les cuesta volver a la normalidad tras las experiencias emocionales. El individuo típico tiende a ser ansioso, preocupado, con cambios de humor y frecuentemente deprimido; probablemente duerme mal y se queja de diferentes desórdenes psicosomáticos; es exageradamente emotivo, presenta reacciones muy fuertes a todo tipo de estímulos y le cuesta volver a la normalidad después de cada experiencia que le provoque una reacción emocional. Sus fuertes reacciones emocionales le interfieren para lograr una adaptación adecuada, y le hacen reaccionar de una manera irracional y, en ocasiones, rígida. Si hubiera que describir sucintamente a este sujeto de valor N alto con un solo adjetivo, se podría decir que es un preocupado; su principal característica es una constante preocupación acerca de cosas o acciones que pueden resultar mal, junto con una fuerte reacción emocional de ansiedad a causa de estos pensamientos. Cuando esta puntuación alta en N se combina con una puntuación media en Extraversión, es probable que el sujeto se muestre quisquilloso e inquieto, impulsivo, y excitable, propenso en definitiva a reacciones denominadas “histéricas”, y cuando se combina con una puntuación alta en Extraversión, buscador de sensaciones, muy excitable, colérico e, incluso agresivo.
El sujeto estable tiende típicamente a responder emocionalmente sólo con un tono bajo y débil, y vuelve a su estado habitual rápidamente después de una elevación emocional; normalmente es equilibrado, calmoso, controlado, y despreocupado.
Cuando una puntuación alta en estabilidad se combina con una puntuación alta en introversión, tenemos al individuo conocido como “flemático”; y cuando lo hace con un alta en extraversión, tenemos al individuo conocido como de “personalidad fuerte”, caracterizado por una gran resistencia psicológica, psicoticismo o Dureza emocional (P) Un sujeto adulto con una puntuación alta en P se puede describir como solitario, despreocupado de las personas, crea problemas a los demás y no compagina con los otros fácilmente; puede ser cruel, frío, inhumano e insensible, y tener falta de sentimientos y empatía; se muestra hostil, incluso con los más íntimos, y agresivo incluso con las personas amadas. Tiene una cierta inclinación por cosas raras y extravagantes; desprecia el peligro; le gusta burlarse de los demás y reírse a costa de los demás, así como ponerles de mal humor, la descripción anterior se aplica a un adulto con P alto; en cuanto a los niños, se puede decir de ellos que son raros y solitarios, se meten en problemas, son fríos y faltos de sentimientos humanitarios con sus compañeros o con los animales, son agresivos y hostiles, incluso con los más próximos y queridos, tales niños intentan suplir su falta de sentimientos entregándose a la búsqueda de sensaciones dolorosas sin pensar en los riesgos implicados, las investigaciones sobre las relaciones de las variables de personalidad implicadas en este modelo con variables del ámbito laboral comenzaron en los años 60. Así Rim (1961) encontró que las personas con bajas puntuaciones en extraversión y en neuroticismo valoraban como muy importante la posibilidad de aprender nuevas habilidades en su entorno laboral, mientras que las personas con elevadas puntuaciones en neuroticismo valoraban como muy importante el obtener un buen salario. En otro estudio inicial, Bending (1963) encontró que los introvertidos mostraban una preferencia significativa hacia puestos de trabajo teóricos y científicos, mientras que los extrovertidos mostraban más interés hacia trabajos que implicarán un mayor contacto social. La extroversión se ha asociado consistentemente y negativamente en diversos estudios con profesiones como arquitecto, matemático, físico, ingeniero o químico. Por su parte, la dimensión de neuroticismo correlaciona negativamente con profesiones como banquero, profesor, jefe de ventas o jefe de oficina.
Varios estudios han encontrado que los extrovertidos se aburren en trabajos que impliquen tareas monótonas, donde además rinden pobremente (Savage y Steward, 1972; Hill, 1975; Kim, 1980). Otros estudios han mostrado como la personalidad se relaciona con los programas de formación y entrenamiento, donde los introvertidos suelen rendir mejor que los extrovertidos (Organ, 1975; Wankowski, 1973; Wilson et al., 1972). Morgenstern et al. (1974) demostraron que los sujetos introvertidos funcionaban menos eficientemente en presencia de distractores, mientras que los sujetos extravertidos lo hacían relativamente bien. Más aún, Jessup y Jessup (1982) demostraron que la personalidad podría predecir el rendimiento en tareas complejas típicas de entornos laborales altamente cualificados. Encontraron que un 60% de los introvertidos neuróticos fallaban en este tipo de tareas, contra un 37% de los extravertidos neuróticos, 32% de los extravertidos estables, y solo un 14% de los introvertidos estables.

En resumen, todos los teóricos de la personalidad reconocen la importancia en entornos laborales de los dos principales rasgos del modelo PEN de Eysenck: extroversión y neuroticismo. La teoría de Eysenck ha sido empleada con mucho éxito por muchos investigadores para examinar la relación entre las variables de personalidad y diversos comportamientos en entornos laborales.  Tras este análisis científico de enfoque que manifiesta de forma clara la relación e influencias entre personalidad y comportamiento laboral, llegamos claramente a la conclusión de que es necesario medir esta relación pues, resulta evidente, aquí aparecen factores de riesgo que hasta hoy no han sido tenidos en cuenta. Cuando hemos hablado de factor humano en prevención de riesgos laborales siempre nos hemos referido o a las características físicas de los individuos o a las relaciones sociales que se producen entre ellos y provocan la aparición de riesgos psicosociales. Y hoy empiezan a existir herramientas de primer nivel que permiten predecir el comportamiento humano personal en materia de prevención de riesgos laborales, siempre basado en el estudio de la personalidad y los diversos factores que la componen. Algunas de ellas están ofreciendo un alto valor predictivo y rompiendo fronteras con notable éxito en la lucha contra la siniestralidad laboral desde perspectivas no exploradas, hasta hace poco tiempo, y aplicando esquemas muy sólidos en el mundo de la psicología moderna.

Anexos del producto:


link: https://vijonality.webnode.es/

0 comentarios:

Publicar un comentario